Historia de Metatrón
Existen dos seres conceptuales conocidos como Metatrón, el primero es el Metatrón primordial, quien fue lo primero
en la creación luego de que este emergiera del Shejiná, la presencia de Dios, pues se contempla que en las primeras
palabras de la Torá, "En el principio Dios creó", se esta haciendo referencia a Metatrón, este asistiría a Dios
en la creación del mundo y ha estado a su lado desde entonces.
Enoc Metatrón
El otro es el Metatrón en el que Enoc se convirtió. Podemos encontrar pasajes de su vida tanto en la Biblia como en el
apócrifo libro de Enoc. Se cuenta que Adán, en su oración a Dios, se disculpo por haber escuchado a su esposa Eva,
quien había sido engañada por la serpiente para que comieran del Árbol del Conocimiento, así que, Dios envió al ángel
Raziel para revelar a Adán las leyes espirituales de la naturaleza y la vida en la Tierra, incluido el conocimiento de
los planetas, las estrellas y las leyes espirituales de la creación. Raziel también enseñó a Adán
el conocimiento del poder del habla, el poder de los pensamientos y el poder del alma de una persona dentro de los confines del cuerpo físico
revelándole como se puede armonizar la existencia física y espiritual.
A su vez, Raziel le enseño la energía contenida dentro de las 22 letras del alfabeto hebreo, sus combinaciones y significados de los nombres.
Así fue como Adán escribió el libro de Raziel a dictado del Arcángel, siendo esta la obra más antigua de la humanidad. Gracias al conocimiento
adquirido, Adán prospero enormemente, por desgracia algunos ángeles estaban celosos de su conocimiento, así que, intentaron hacer que cayera en pecado,
se postraron ante él y comenzaron a adorarlo con el fin de que el hombre se proclamara un dios, pero Adán no cayo en la tentación y les dijo no me recen
a mí, si no conmigo a Yavé. Entonces los ángeles tomaron el libro y lo arrojaron al mar, este seria recuperado más tarde por ordenes de Dios y devuelto
a Adán, quien lo escondió para que no volviera a ser robado, por desgracia tras su muerte nadie más conoció su paradero.
Por mucho tiempo el libro se mantuvo oculto en la cueva donde Adán lo oculto, pero un día Enoc, quien era descendiente de Adán tuvo una revelación,
Dios envió un sueño a Enoc, en él le mostró la cueva donde estaba oculto el libro y le ordeno recuperarlo, Enoc así lo hizo y tras recuperarlo
lo estudio día tras día, a diferencia de Adán, quien solo había leído el libro, Enoc lo comprendió perfectamente, llegando a un grado de entendimiento
superior, gracias a esto y a su enorme fe, Dios recompenso a Enoc llevándolo al cielo.
Y caminó Enoc con Dios, después que engendró a Matusalén, trescientos años, y engendró hijos e hijas.
Y fueron todos los días de Enoc trescientos sesenta y cinco años. Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció, porque Dios se lo llevó.